Por decisión de, Gabriel Boric, actual presidente de Chile, se ordenó militarizar la frontera por el lado Norte del país.
Acatando la orden de su presidente, el Ejército chileno realizó un Despliegue Militar instalándose en los puntos críticos de la frontera norte entre Chile, Perú y Bolivia para regular el ingreso ilegal de personas provenientes de estos y otros países al territorio.
El despliegue militar tiene como medidas: llevar los controles de identidad, el registro de equipajes si existe presunción de delito y hasta hacer disparos de advertencia con el objetivo de disuadir a quienes intenten cruzar la frontera de manera irregular.
La medida tendrá una duración de 90 días que empezó a regir desde el pasado lunes 26 de febrero gracias a un decreto con Fuerza de Ley.
Por su parte la Ministra del Interior de Chile, Carolina Tohá, declaró que su país lleva mucho tiempo sin hacer lo que debe hacer para tener control de su territorio y agregó diciendo que no solo faltan militares, sino muchas cosas como: personal, tecnología, facultades legales y presupuesto.